Actuá a tiempo y evitá complicaciones futuras con nuestro tratamiento rápido y efectivo de endodoncia.
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La endodoncia, también conocida como tratamiento de conductos, es un procedimiento odontológico que se realiza para salvar un diente dañado o infectado.
Consiste en eliminar la pulpa dental, que es el tejido interno del diente que contiene nervios y vasos sanguíneos, y luego limpiar y sellar los conductos radiculares.
Este tratamiento es necesario cuando la pulpa se ve afectada por caries profundas, fracturas o infecciones.
Tratamiento en dientes con un solo conducto radicular, comúnmente en incisivos y caninos. Este procedimiento asegura la limpieza y sellado de la raíz para preservar la salud del diente.
Tratamiento en dientes con dos conductos radiculares, como algunos premolares. Con un enfoque minucioso, garantizamos la limpieza efectiva de todos los conductos para prevenir futuras infecciones.
Procedimiento avanzado para dientes con tres o más conductos radiculares, típicos en molares. Nuestra tecnología y experiencia permiten un tratamiento preciso para garantizar un resultado duradero.
En casos donde un tratamiento de conductos anterior no ha sido exitoso, realizamos una reendodoncia para volver a limpiar y sellar el conducto radicular, salvando el diente afectado.
No dejes que el dolor o la infección avancen. ¡Agenda tu consulta de endodoncia ahora!
Con más de una década de experiencia, nos dedicamos a transformar sonrisas mediante tratamientos de vanguardia que combinan tecnología de última generación, innovación y un enfoque completamente personalizado.
Utilizamos herramientas digitales avanzadas que nos permiten ofrecer diagnósticos precisos y una planificación eficiente, asegurando procedimientos más cómodos, rápidos y predecibles.
Ofrecemos más de 10 especialidades odontológicas, entre las que se encuentra la endodoncia, así como implantología, ortodoncia, estética dental y rehabilitación oral, para cubrir todas tus necesidades de salud y estética dental.
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Tras la limpieza, se aseguran de que los conductos estén completamente secos para evitar complicaciones posteriores.
Se elige un material biocompatible, generalmente gutapercha, que se adapte a la forma de los conductos.
El material se introduce cuidadosamente en los conductos radiculares para rellenarlos por completo.
Se aplica un sellador que refuerza el cierre de los conductos, evitando la entrada de bacterias y reduciendo el riesgo de reinfección.
Un tratamiento de endodoncia puede durar muchos años, e incluso toda la vida, si se acompaña de una buena higiene oral, controles periódicos y una restauración adecuada.
Es fundamental proteger el diente tratado con una corona o reconstrucción definitiva para evitar fracturas y nuevas infecciones.
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La endodoncia es el procedimiento odontológico en el que se trata el interior del diente para eliminar infecciones y conservar la pieza dental. El «tratamiento de conducto» es una parte del proceso de la endodoncia, en la cual se limpian y sellan los conductos radiculares. En otras palabras, la endodoncia es el término general, mientras que el tratamiento de conducto es un paso clave dentro de ella.
Si la estructura dental está muy destruida y no se puede reconstruir.
Si hay una fractura vertical en la raíz del diente.
Si la infección se ha extendido gravemente a los tejidos circundantes.
En estos casos, la extracción del diente y su posterior reemplazo con un implante o puente dental puede ser la mejor opción.
Primeros días: Puede haber sensibilidad o molestias leves.
1-2 semanas: El dolor suele desaparecer por completo.
Varios meses: El tejido óseo y la raíz terminan de cicatrizar completamente.
El costo de una endodoncia varía según diferentes factores, como la complejidad del caso, el número de conductos radiculares y la clínica donde se realice. Para obtener un presupuesto personalizado, te recomendamos agendar una consulta con nuestros especialistas.
Dolor persistente o recurrente en el diente tratado.
Inflamación de las encías o aparición de abscesos.
Sensibilidad extrema al masticar.
Oscurecimiento del diente.
Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante acudir al odontólogo para una evaluación.
No, la endodoncia se realiza con anestesia local, por lo que el paciente no siente dolor durante el procedimiento. Sin embargo, puede haber molestias leves después del tratamiento, que se controlan con analgésicos.
El procedimiento puede durar entre 60 y 90 minutos, dependiendo de la complejidad del caso y la cantidad de conductos a tratar. En algunos casos, puede requerir más de una sesión.
Si un diente necesita una endodoncia y no se trata, la infección puede avanzar, causando dolor intenso, abscesos y hasta la pérdida del diente. Además, la infección puede extenderse a otras áreas del cuerpo, afectando la salud general.
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